No desperdiciarás ni el plato

Vajilla realizada con fécula de patata. (Foto: 19bis.com)

La conferencia Vallona European Creative District se cerraba la pasada semana con la presentación de una vajilla muy singular. 

Bajo el lema ‘Todo se come, nada se pierde’ aparecía en escena una apetitosa vajilla, una vajilla comestible. La iniciativa ecológica persigue animar a los ciudadanos a reducir los desechos que producen cada día, para lo  que les ofrece la posibilidad de “no desperdiciar ni el plato”.

La portavoz del proyecto, Cyrielle Doutrewe, invitó a todo el público asistente a ”sustituir los recipientes de plástico habituales por platos y tazas un 100% comestibles fabricados con fécula de patata”.

La iniciativa puede parecer innovadora y novedosa a primera vista, pero no olvidemos que vajillas comestibles ya existen algunas:

1.- ‘La vajilla de galleta comestible’, fabricada por el diseñador japonés Nobuhiko Arikawa en el año 2008 para un restaurante de de Japón que incluye, fabricado en el mismo material, los palillos para comer.

Vajilla de galleta comestible. (Foto: Gastronomía y cía)

Esta vajilla está elaborada con una pasta a base de harina, agua y sal, y el método de cocción empleado en su fabricación permite que la vajilla se mantenga fresca durante varios meses si se encuentra en las condiciones ambientales adecuadas y lejos de la humedad.

2.- Pero la cosa no queda ahí, al poco tiempo llegan ‘los cubiertos de pan’, fabricados en ese material por Tim Simpson. En este caso se hizo un molde y todo para que pudiéramos fabricarlos nosotros mismos en casa.

Utensilios de cocina de pan. (Foto: laslentejas.com)

Tazas de café de Sardi

3.- En abril del año 2013 nos sorprendía la marca de café de origen italiano Lavazza con sus deliciosas tazas comestibles diseñadas por el venezolano Enrique Luís Sardi.

4.- ‘La vajilla ACT’, la más reciente presentada en febrero de este mismo año 2014. Se trata de una vajilla fabricada en pan a partir de  moldes de porcelana, diseñada por la alemana Carmen Buttjer.

Vajilla ACT de Carmen Buttjer. (Foto: eltornilloquetefalta)

A pesar de la resistencia al calor de la mayoría de ellos, no sabemos cómo responderán estos recipientes ante algunos alimentos de marcada liquidez, como sopas o salsas, sobre todo en el caso de los cubiertos, tampoco cómo resultará el maridaje que ofrezcan con determinados sabores, lo que sí es seguro es que la comodidad será una ventaja añadida, ya que por sus características no será necesario limpiarlos.